En Sara de Benítez consideramos que todas las mujeres somos especiales. Todas tenemos nuestras virtudes y nuestros defectos pero también sabemos que somos perfectas tal y como somos.
Por eso desde nuestro atelier, no queremos que las medidas de ninguna de nosotras sea un impedimento para lucir uno de nuestros diseños. Y es que, en Sara de Benítez, adaptamos todos nuestros vestidos a tallas que van desde la 34 a la 54 sin que esto repercuta, absolutamente en nada, en su precio.
Sí que es cierto que para tallajes superiores es necesario una subida mínima de precio. Pero es, simplemente, por la necesidad de tener que aumentar el tamaño de las telas para el diseño de nuestros producto. No se contempla ningún otro motivo por el que creamos que debemos subir el precio de un producto.
Sólo porque su tallaje sea «especial». Para nada. Tiene más o menos tela, pero aquí, todos los productos son «especiales» para nosotras.